Tecnologías #smart para la Tercera Revolución Industrial


En los últimos años Internet ha cambiado el estilo de vida de la sociedad. La comunicación entre la sociedad y la aparición de las Tecnologías en Comunicación y de la Información (TIC) ha dado una vuelta de 180º incorporando nuevas tecnologías en nuestros hábitos diarios. Cuando todos estos cambios se globalizan se produce una revolución. Estamos hablando de una revolución silenciosa e inteligente: la Tercera Revolución Industrial.
La Tercera Revolución Industrial, o Revolución de la Inteligencia (RCT) es un concepto esbozado por Jeremy Rifkin y avalada por el Parlamento Europeo, en una declaración formal aprobada en junio de 2007. A lo largo de la historia, las transformaciones económicas ocurren cuando convergen las nuevas tecnologías de la comunicación con los nuevos sistemas de energía. Las nuevas formas de comunicación se convierten en el medio de organización y gestión que las civilizaciones más complejas han hecho posible mediante las nuevas fuentes de energía. La conjunción de la tecnología de comunicación de Internet y las energías renovables en el siglo XXI, está dando lugar a la Tercera Revolución Industrial.

Jeremy Rifkin dice que 'España puede liderar 

la Tercera Revolución Industrial'


En los últimos años las Smart Cities o Ciudades Inteligentes han tomado especial relevancia en el ámbito de las I+D+I y en este contexto se han generado un importante número de proyectos en todo el mundo. Aunque no hay una definición exacta sobre que son las Smart Cities, las podemos describir como aquellas ciudades que aplican las TIC (Tecnologías de la Información y las Comunicaciones) en la misma ciudad con el objetivo de proveerla de una infraestructura que, en cierto grado, garantice un desarrollo sostenible, un incremento de la calidad de vida de sus ciudadanos, una mayor eficiencia de sus recursos (de tipo humano como energético) y una mejor participación ciudadana.
Si bien las Smart Cities no están relacionadas directamente a una o varias tecnologías determinadas, sí que están directamente relacionadas con aquellas tecnologías que permiten generar datos con referencia a la ciudad y también interactuar con sus elementos, como son las redes de sensores. Dentro de las redes de sensores, las Smart Cities requieren diferentes tipos de tecnologías tanto a nivel de hardware de los propios nodos (ex: transductores, electrónica de adaptación, alimentación eléctrica, captación de energía, etc.) como a nivel de aplicación (ex: representación gráfica, geolocalización, integración web, etc.).
La principal motivación para este proyecto radica en el hecho que la mayoría de estas tecnologías que participan disponen de sus estándares, o bien son tecnologías propietarias, pero en ningún caso hay un estándar o modelo de referencia que integre todas las tecnologías aplicadas al campo específico de las Smart Cities.
Hacia la ¿Futura #SmartCity?
En particular, este proyecto pretende definir, diseñar y desarrollar un modelo de referencia de una plataforma de gestión de redes y datos sensoriales para una Smart City y finalmente validarlo en una ciudad importante como es Barcelona, con el objetivo final que este modelo pueda ser adoptado para cualquier otra ciudad alrededor del mundo.
Actualmente ya existen Softwares inteligentes para la gestión de ciudades en el ámbito urbano: Un Software como el MAWIS U2.0 (MOBA Automatic Urban Intelligent Information System). Este sistema ha sido desarrollado por la empresa MOBA.

Con este software se puede consultar la posición de la flota de vehículos de mantenimiento de las ciudades en tiempo real, el histórico de estos vehículos, las colecciones de hecho, sensores y otros datos. En las ciudades se instalan unos sensores que recopilan información y utilizando las TIC se gestionan los datos para optimizar servicios.Una de las claves para lograr la implementación de una ciudad inteligente es que se cree en un entorno abierto, con una plataforma interoperable y escalable basada en códigos e interfaces públicos.

 
El equipamiento de los vehículos va desde un simple GPS/GPRS dispositivo de localización de vehículos y se puede ampliar con sensores (es decir barredora, agua, sal…), sistemas RFID y de pesaje. Para proyectos grandes, también es posible instalar la aplicación en el servidor del cliente y personalizar a sus necesidades.

Las ciudades inteligentes tienen que ir en sinergia con una sociedad inteligente. El ciudadano tiene que participar activamente en el cuidado del medioambiente, reciclaje y respeto a las nuevas tecnologías. 

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