Sobre comunicación 2.0
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| Cerebro 2.0 |
La comunicación evoluciona como lo hace el
ser humano que se adapta a nuevas realidades y entornos. Cada era, cada
sociedad busca, de forma natural, el desarrollo de su expresión para que
encaje en el mundo que le rodea.
Hoy en día el terreno nos obliga cada vez más
a extrapolar nuestra identidad, nuestro ser, a todos los campos expresivos
de nuestra vida y de nuestra comunicación. Existen nuevos criterios para
tener una buena comunicación y que se añaden a los ya conocidos. Además de
la claridad o a la eficacia se aprecian otros nuevos como son:
la expresión, la intuición, la autenticidad y la creatividad.
Sobre comunicación 2.0
Internet ha modificado en sólo
unos años el panorama publicitario, pasando a ser un espacio esencial para la reputación
empresarial. En este nuevo mundo digital, las noticias tanto buenas como malas
se comparten y se multiplican a velocidad de aquí y ahora. Una noticia negativa
o infundada que no se corrija a tiempo, se puede multiplicar rápidamente hasta
convertirse en la versión aceptada por la mayoría, creando una auténtica crisis
de empresa.
Esta característica
multidialogante de la red de redes es lo que el escritor y empresario Tim
O'Reilly venía a llamar hace unos años Web 2.0: “La interactividad sosegada
de los foros web o de las interacciones de la comunidad Geocities ha hecho
masiva e inmediata con Messenger, Skype, Gmail y, definitivamente, las redes
sociales”. El resultado es una cultura de uso que impregna a todas las
actividades virtuales. Los bloques, aquellos sitios web que recogen las
aportaciones personales del navegante, como una bitácora cotidiana de la
experiencia del internauta, dotan de espacio informativo a una buena parte de
la población cibernética. De navegando propietario de la isla. De receptor a
emisor.
El navegante 2.0 interviene en
los lugares por donde pasa, aportando, ordenando y valorando los contenidos. Y
la Wiki, aquella aplicación web donde los visitantes operan sobre documentos
colectivos, bajo criterios definidos y procesos consensuados, es su expresión
más clara.
Pero los clientes también
utilizan Internet para comunicarse, así que los propios directivos
publicitarios, en alerta ante este nuevo escenario, reflexionan sobre los retos
que se les acercan. Los publicistas ya no sólo nos dirigimos a los periodistas
como amplificadores de noticias o informaciones provenientes de nuestras
empresas o clientes, sino que tenemos que llegar a otro grupo de
influenciadores muy diferente y segmentado (bloggers, usuarios activos, etc).
Esto nos obliga a conocer perfectamente la Red, cuáles son los actores
principales, qué les interesa y de qué manera quieren recibir nuestra
información .
Mi definición de sociedad 2.0: “Las personas somos como marcas en un supermercado. Nos vamos publicitando en las redes sociales y nuestro entorno 2.0. Ser una buena marca puede abrir muchas puertas.”
Conclusión del libro
Es un libro que puede funcionar como enciclopedia, además
de ayudar a situar las diferentes problemáticas que necesariamente conlleva el
estudio de la cultura y la comunicación. Hace comprender el contexto
comunicativo del 1er mundo y las fuentes influyentes.
No sólo se
reflexiona sobre distintos aspectos económicos, políticos, sociológicos
e incluso antropológicos, sino que ofrece multitud de propuestas sobre la
caracterización del servicio público y de lo que debería ser una televisión
pública, sobre la necesidad de crear consejos del audiovisual que tengan entre
sus competencias no sólo la televisión sino también Internet, etc.
Hoy en día tenemos miles de opciones para hacer cualquier cosa.
Opciones que afectan a la toma de decisiones trascendentales, o a los detalles
más insignificantes. Miles opciones que generan dudas. Estamos expuestos a un
exceso de información que genera indecisión. Estamos intoxicados de
información; estamos infoxicados.
Tenemos que ver la comunicación 2.0 como un nicho de
mercado para las futuras generaciones. La saturación de los medios como: TV,
radio, Cine y la crisis económica obliga a adoptar nuevas políticas de
comunicación. Cabe destacar que en Internet no hay crisis i tal y como se van
desarrollando el actual contexto socioeconómico las plataformas 2.0 son el
nicho de mercado de muchos emprendedores.
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